Medio sábado. Venta nocturna por la noche, pocas cosas que comprar y muchas por suspirar. Una mañana rodeada de intentos de no quedar en cama dos horas de más. Cabello mojado y pocas ganas de bajar material a .mov. Aún en busca de tantas claquetas perdidas, en búsqueda de argumentos para esas historias que comenzamos a escribir. Una típica mañana de sábado y es hora de volver a dormir.
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